Oración abre caminos

Señor mío, acudo a ti en esta ocasión primordialmente para agradecerte por todas las bendiciones y favores que me has concedido, tanto físicos como espirituales. Te doy gracias Señor por mi vida, por cada algo que me has otorgado aun sin darme cuenta, que me hacen despertar todos los días muchísimo más relajado.

Te agradezco además por cada centavo que he ganado limpia y dignamente con el trabajo honesto, dado que por medio de eso he podido subsistir, vivir y contribuir a mi familia y prójimo en mi deber como católico.

Amado Padre Santo, hoy te doy las llaves de mis anhelos, de mi suerte, de mis finanzas y de mi corazón, para que seas tú quien guíe con tu vigorosa inteligencia y conocimiento infinito, tu que conoces mi alma mejor que nadie, ilumíname y dame tu sustento, y que mi corazón jamás se además de tu amor, para de esta forma arrimar solamente cosas buenas a mi destino.

Alimenta mi espíritu con un óptimo querer, que sea sincero, atento y lo verdaderamente importante: recíproco y saludable. Facilita que las bondades que han de llegar a mí, me alcancen sin contratiempos, y que logre gozar de todas las bendiciones con salud, en empresa de mis seres amados y pacíficamente conmigo mismo/a.

Con absoluta seguridad, cual hijo que sabe que tiene un Padre que lo protege, de esta forma me encomiendo a ti mi Salvador, con humildad y reverencia, te alabo y consagro Padre porque tú eres especial e inequívoco. Amén.

Amado Jesucristo, tú que en el camino por la presencia sanaste leprosos, levantaste paralíticos, que conoces la esencia de la vida, tu que das y quitas; a ti vengo a poner la salud y la alegría tanto mía como la de mis conocidos cercanos, para que concibas el milagro desde nuestro interior, rejuveneciendo nuestro cuerpo y sentidos, para que así, dichosos tengamos la posibilidad disfrutar de este paso terrenal en armonía y mucha fortaleza.

Moderniza mi alegría y energía por vivir, por estudiar, por comprender las cosas más sencillas, dado que ahí estas tu Señor, no dejes que jamás me falte curiosidad por tu palabra y por tus secretos, camina a mi lado Dios mío, dándome tu bendición en cada latido de mi corazón y de mis semejantes.

Eres un Dios Justo y Poderoso, para ti no hay nada irrealizable, no hay parámetros ni misterios, por eso te consagro lo verdaderamente preciado que un ser humano podría tener: alma, cuerpo y cabeza tanto propias como de sus seres amados, llénanos de brío, vigor y confort. Con plena seguridad de que obrarás en mis necesidades, para tus fines Santos, confió en ti. Amén.

Amado hijo de Dios, Jesús, tu que conociste realmente bien lo que es el trabajo periódico, que con tus utilidades y propias manos hiciste la tarea de carpintero para sustentar a tu familia, a ti vengo con sin limites locura a pedir que me socorras a hallar un empleo digno y santo, en el que logre ser bueno sin ofender ni perjudicar a nadie.

Te pido un trabajo precisamente remunerado, con el cual logre ofrecer alimento, educación, contemplar costos doctores y abundancia a mi familia, como és como lo meritan, que en mi vida logre sentir la calma de que soy servible, bueno/a y que tengan el soporte periódico.

Sé que siempre has estado conmigo, que nunca has abandonado mi sendero ni el de los míos, nos dijiste: “tocad la puerta y se les abrirá”, por eso, en este momento lo estoy realizando, con entera disposición, fe y perseverancia, sé que me colocarás en una tarea donde logre asistir en la tierra y en tus fines impecables, prestando asistencia a crecer tu Reino.

Gracias por escucharme, por entenderme, comprenderme y perdonarme siempre que te he faltado, creo en ti y en tu grandeza, porque en tu fantástica indulgencia nos compadeces y nos ayudas a remover ataduras, que tu Santo Espíritu nos cubra siempre con tu felicidad. Amén.